Vietnam (VI): My son.

El plan de hoy es sencillo, llegar vivos a My Son, un lugar declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO y considerado como uno de los lugares arqueológicos de más valor de toda Indochina (para los de la LOGSE: la península de Indochina va desde India, hasta China. ¿Fácil, no? Camboya, Vietnam, Birmania, Laos y Tailandia). Por desgracia, los americanos se cargaron bastante cuando estuvieron aquí, pero aún así os va a dejar sorprendidos como lo ha hecho conmigo.

Se considera uno de los complejos de templos hindúes más importante del sudeste asiático, y según la UNESCO evidencia la existencia de una civilización ya extinta en la región. Para llegar hasta este complejo, tenemos por delante una hora y media de motoreo por la región, sol abrasador y muchos, pero que muchos pitidos. La entrada es bastante cara en comparación con otros precios en Vietnam, ya que sale a unos 7 euros por cabeza la entrada, pero merece totalmente la pena.

Casi nos tuvieron que recoger con cuchara del calor que hacía (35º y otros diez más de sencación térmica por el 95% de humedad), menos mal que llevamos botellas de agua para parar un tren, y que somos duros como piedras, por supuesto. Así que tras pasar unas horas disfrutando del paisaje, nos pusimos de nuevo en marcha cogiendo esta vez por otro camino diferente para seguir descubriendo cosas. Y bingo, encontramos una “autopista” a través de campos de arroz preciosa, que nos llevó desde la mitad del camino hasta casi Hoi An.

A estas alturas, empezaba a notar que me estaba quemando los brazos, así que me he agenciado un bote de crema factor 50 para empezar a ponérmelo cada vez que salga a conducir, y es que no os podéis imaginar el calor que hace (¿otra vez, Salvi?), que tengo las manos de color rojo casi. Así que una vez regresamos, nos metimos en la piscina y nos quedamos unas horas allí.

A partir de ahí, decidimos dar una vuelta por la ciudad, y luego regresamos pronto a casa para cenar, descansar, y discutir nuestros próximos destinos…

Deja un comentario